Estadísticas

ESTADÍSTICAS INTERNACIONALES

Consumidores de droga estimados en todo el planeta
(información del año 2000)


Heroína = 8,000,000
cocaína = 13,300,000
Alucinógenos = 25,500,000
Amfetaminas = 30,200,000
Marihuana = 141,200,000
Sedantes = 227,400,000

Fuente: Organización Mundial de la Salud - Naciones Unidas, 2000


ESTADÍSTICAS MEXICANAS

Consumidores de droga estimados en México (información del año 2002)

Inhalantes = 40,925

Cocaína = 99,202

Marihuana = 334,731

Fuente: Encuesta Nacional de Adicciones - Secretaría de Salubridad y Asistencia, 1998



Resultados de la Tercera Encuesta Nacional de Adicciones (Realizada en 2002)*
De cada 100 mexicanos entre 12 y 65 años de edad que habitan en la población urbana:

5.27% han consumido drogas ilegales alguna vez

1.23% lo hicieron durante el último año

0.83% lo hicieron en el último mes

El uso en el último mes de cualquier droga fue registrado en 0.83% (403,510 personas) de la muestra estudiada, y representa menos de la quinta parte de los que consumieron alguna vez en su vida, o sea el 5.27% de la población (2.5 millones de personas)


Las drogas que más se utilizan en México son:
Marihuana: 0.70% (334,731 personas) la usaron en el último mes

Cocaína: 0.21% (99,202 personas) la usaron en el último mes

Inhalantes: 0.09% (40,925 personas) los usaron en el último mes



Conclusión: De los casi 100 millones de mexicanos que somos, cerca de 400 mil personas pueden considerarse como "usuarios fuertes" de drogas ilegales.

*La Secretaría de Salud realiza esta encuesta cada cinco años




ESTADÍSTICAS ESPAÑOLAS

Tendencias actuales del consumo de drogas

A partir de la creación del Observatorio Español sobre Drogas, los datos sobre consumo de drogas, así como las consecuencias asociadas al mismo, aparecen en los Informes que, periódicamente se editan avalados por dicho organismo, siguiendo el Sistema de Indicadores aprobado por su Consejo Asesor.

Según los datos de que se dispone en estos momentos, provenientes fundamentalmente de las Encuestas Domiciliarias sobre Consumo de Drogas de 1995 y 1997 y las Encuestas a Población Escolar de 1994 y 1996, durante la década de los noventa, el fenómeno de las drogas ha sufrido importantes transformaciones en España con una serie de cambios que han perfilado un escenario diferente y más complejo que el existente en los pasados años 80.

Si durante toda la década anterior y primeros años 90, la "droga" se asociaba en nuestro país fundamentalmente con la heroína y ésta era la sustancia que más preocupación causaba a la sociedad española, hoy tenemos claras evidencias sobre el descenso de su consumo en todas sus modalidades, tanto en el experimental, como en el ocasional y en el habitual. Esto no significa que no suframos aún durante años las graves consecuencias derivadas de su consumo. De hecho, la antigüedad en el consumo de muchos drogodependientes y la presencia del sida y otras enfermedades asociadas generan un gran número de problemas individuales y familiares tanto en la esfera sanitaria como social.

Desde principios de los años 90 aparece un nuevo fenómeno emergente caracterizado por el uso de nuevas drogas y la adopción de nuevos patrones de consumo. Entre las primeras han adquirido relevancia social las llamadas "drogas de síntesis", con una gran expansión en un corto período de tiempo.

Lo más peculiar de estas sustancias -junto a otras más conocidas, como la cocaína o el alcohol- es la forma en que son consumidas por determinados sectores juveniles. Son consumos de fin de semana, fuera del ámbito familiar, en espacios o locales públicos y con la casi única motivación de la diversión. En el caso del alcohol existe con frecuencia una búsqueda intencionada de la embriaguez, con cambios en los horarios de salida de los jóvenes, y consumos en la vía pública, características que amplifican el fenómeno.

Un aspecto que conviene resaltar es que estos consumos no encierran generalmente posiciones contraculturales o comportamientos marginales como sucedía con frecuencia en el caso del consumo de la heroína. Nos encontramos con nuevas modas, nuevas formas de estar en sociedad, que afectan a grupos importantes de jóvenes relativamente normalizados en otras esferas de su vida.

Las principales tendencias en lo que se refiere al consumo, podrían sintetizarse del siguiente modo:

Heroína

Todos los datos disponibles apuntan a una estabilización, o incluso, descenso de su consumo. Así, entre 1995 y 1997, los que habían consumido heroína alguna vez en la vida han pasado del 1% al 0,5%, y los que la habían tomado en el mes anterior a ser encuestados del 0,4% al 0,15%.

A esto hay que añadir un dato de sumo interés desde el punto de vista de la salud pública: entre los consumidores de heroína continúa disminuyendo la vía de la inyección y aumentando la práctica de fumar o inhalar esta droga. Desde 1991 a 1997, la vía intravenosa ha descendido 26 puntos, pasando del 50,3% al 23,8%.

Drogas de síntesis (éxtasis y similares)

Se trata de psicofármacos sintéticos, en general variantes de la anfetamina. La más conocida, el éxtasis o MDMA está incluida desde 1985 en la lista I del Convenio sobre Sustancias Psicotrópicas de las Naciones Unidas, que es donde se agrupan las sustancias consideradas más peligrosas y, por ello, más sujetas a control internacional.

Estas sustancias aparecieron en España en lugares de fuerte predominio turístico (Ibiza y Levante), y, en un primer momento, entre extranjeros. Su consumo se extendió con una gran rapidez a partir de comienzos de los años 90 y en un breve espacio de tiempo.

Las drogas de síntesis forman y lideran una asociación de consumo con otras drogas, en especial los alucinógenos y las amfetaminas, lo que les confiere un riesgo notable.

En cuanto a datos sobre su consumo, la última encuesta domiciliaria efectuada a la población general española de 15 a 65 años (1997), señala que un 2,5% de los españoles habían consumido estas drogas alguna vez en la vida y un 1% en el último año. Sin embargo, hay que destacar el hecho de que una elevada proporción de quienes han consumido estas sustancias en alguna ocasión ya no lo hacen actualmente.

Pero el dato más relevante lo constituye, sin duda, la estabilización encontrada, por primera vez desde su aparición, en este tipo de sustancias. Incluso, y aunque es todavía pronto para poder afirmar que estamos ante una tendencia de consumo descendente y habrá que esperar a que otras encuestas confirmen estos resultados, existen datos que apuntan en este sentido.

Cocaína

No parecen apreciarse grandes cambios en el consumo por parte de la población general que, según nuestros últimos datos se sitúa en un 3,2% para el consumo "alguna vez en la vida" y un 1,5% en el período de doce meses anterior a ser encuestados. Sí se detectó un ligero incremento durante los últimos años entre la población juvenil. En este sentido, la comparación entre las Encuestas Escolares (realizadas a estudiantes de 14 a 18 años de toda España) de 1994 y 1996, muestra que en este sector de población, se pasó de un 1,7% al 2,6% entre los que afirmaban haberla consumido en los doce meses anteriores a ser encuestados.

El hecho más relevante en relación con el consumo de esta sustancia es el significativo aumento del número de personas que piden ser atendidas en servicios sanitarios y sociales en los últimos dos años. Entre 1995 y 1997 este tipo de demandas se ha duplicado. Todo ello aconseja un mayor nivel de vigilancia epidemiológica, prevención y tratamiento especializado de los problemas asociados a este consumo.

Respecto al crack, su consumo está, afortunadamente, muy poco extendido entre la población. No obstante, parece que existe un cierto consumo entre los usuarios de heroína, especialmente en algunas Comunidades Autónomas del sur de España, donde la heroína se consume principalmente por vía pulmonar (fumada o inhalada).

Cánnabis

Sus derivados, fundamentalmente el hachís, siguen siendo las drogas ilegales de consumo más extendido en España. Aproximadamente, uno de cada cinco españoles ha probado alguna vez esta sustancia.

Aunque hay que ser cautelosos a la hora de concluir que el consumo de cánnabis está aumentando en la población general, sí puede confirmarse una expansión de este consumo en la población juvenil y adolescente durante los últimos años.

Teniendo en cuenta al conjunto de la población, un 2,6% puede considerarse que son consumidores habituales: de hecho, ésta es la proporción de personas que lo consumen con una frecuencia semanal.

Alcohol

Sin duda es ésta la sustancia tóxica más consumida por los españoles: el 60,7% del conjunto de la población declara haber consumido alcohol durante los 30 días previos a ser encuestados, el 12,9% lo hace diariamente y un 9,3% se había emborrachado alguna vez durante el último año.

Los análisis realizados por el Observatorio Español sobre Drogas constatan una serie de aspectos que conviene resaltar:

- La mayor proporción de personas que declaran consumir alcohol en el mes anterior a ser encuestados se da en el período de edad entre los 19 y los 28 años. En ese intervalo se llega a un 73% de bebedores de fin de semana, siendo éste un patrón de consumo en clara expansión.

- Otra de las características del patrón juvenil es la búsqueda intencionada de la embriaguez, de tal modo que el 39,5% de los jóvenes declara haberse emborrachado durante el último año previo a la encuesta y hasta el 4% en la semana anterior.

- Otro aspecto significativo de estas nuevas tendencias es la creciente incorporación de las mujeres jóvenes al consumo de alcohol. De hecho, existe una práctica equivalencia en las tasas de consumo de alcohol entre los sexos en las edades de 15 a 17 años.

Una realidad preocupante la constituye la evidente precocidad en los consumos de tal modo que el 36,3% de los adolescentes (una población de 3.400.000 menores) ha probado el alcohol antes de cumplir los 16 años.

A pesar de estos datos, persiste una gran tolerancia social ante el consumo de alcohol, y una escasa percepción del riesgo del mismo, lo que dificulta la aplicación de estrategias dirigidas a su prevención.

Tabaco

El tabaco es, junto con el alcohol, la sustancia tóxica más consumida por los españoles. Según los últimos datos disponibles, una gran mayoría de españoles la ha probado en alguna ocasión, situándose la edad media de contacto con esta sustancia a los 16.6 años para el conjunto de la población. Los mayores consumidores diarios de tabaco se registran entre los hombres, las personas de 29 a 38 años y aquellas con estudios de BUP/FP y EGB.

Las actuales generaciones de jóvenes se inician antes en el hábito de fumar, con un procentaje apreciable que ha probado esta sustancia antes de los 14 años. Igualmente, hay que señalar que las mujeres de 15 a 18 años de edad empiezan a fumar antes que los varones de la misma edad, al contario de lo que sucedía en generaciones anteriores.

Por otro lado, en el sector de jóvenes de 15 a 18 años que fuma todos los días, es superior el porcentaje de mujeres que tienen este hábito que el de hombres.

Fuente: Observatorio Español sobre Drogas